En los últimos años, Villa Alemana ha doblado el número de habitantes y junto con ello ha ido teniendo modificaciones importantes en su mirada de ciudad y distribución urbana. Es por ello que el municipio apostó por un nuevo ordenamiento y comenzó con la gestión de actualizar su plan regulador, aun cuando se encuentre vigente desde el año 2003.

Al respecto, José Sabat Marcos, alcalde de la comuna, expresó que, “tomamos la decisión, porque nos fuimos dando cuenta que, si bien nuestra propia proyección era que Villa Alemana dejara de ser una ciudad dormitorio, el aumento en la densidad de la población y sobre todo el desarrollo explosivo de proyectos inmobiliarios, nos llevaron a reflexionar y decidir que esto había que regularlo, desde la nueva ciudad que tenemos”.

De hecho, la sociedad civil hizo sentir su preocupación en esta materia en noviembre del 2019, cuando en la consulta ciudadana realizada por el municipio, alertaban la necesidad de proteger los cerros y la creación de más parques y áreas verdes en la comuna.

En virtud de esta necesidad, el municipio gestionó por más de 2 años, los recursos para la actualización de su plan regulador. “Ha sido un proceso complejo, porque costó obtener el financiamiento, debimos incluso postular a fondos más de una vez para inyectar más recursos, ya que con el pasar del tiempo los costos para su nuevo diseño fueron aumentando. Tuvimos más de una licitación sin llegar a puerto, pero fuimos perseverantes y conseguimos, mediante un Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) 220 millones y de hecho, hace unos días, terminamos exitosamente el último proceso de licitación, siendo aprobada la adjudicación en el concejo municipal, lo que nos permite comenzar con una de las etapas más importantes de este proceso, que es la participación ciudadana”, agregó Sabat.

Precisamente en esta línea, Jorge Jorquera, Director de Obras Municipales, explica que, “en esta primera etapa es cuando más necesitamos que la comunidad esté presente, estimamos nosotros que esto ocurra en un periodo de cuatro a seis meses. Es importante tener en cuenta que este trabajo no es casual, la legislación establece el procedimiento completo y un gran valor a lo que tiene relación con la evaluación estratégica ambiental tiene ver, no sólo con el tema medioambiental, sino también con la participación de las personas”.

Agregó que “este instrumento de participación tiene que ser capaz de abordar todos los ámbitos que se involucran en el desarrollo sustentable y en el crecimiento urbano de una comuna, por eso tenemos el gran desafío de motivar a nuestros vecinos para que participen de manera proactiva, aun cuando estemos en medio de esta pandemia. Para eso buscaremos los mecanismos que nos aseguren una alta participación ya sea a través de plataformas tecnológicas como zoom, encuestas online, página web u otros, además de una gran difusión en los medios que tenga la municipalidad para que cumplamos nuestros objetivos”.

Participación de toda la comunidad

Respecto a quienes pueden participar, el líder comunal enfatizó en que la participación es abierta a toda la comunidad y para efectos de organizar este proceso, “queremos que los grupos ambientalistas, las juntas de vecinos, organizaciones sociales, pero también bomberos, carabineros, colegios, representantes de servicios, la cámara de comercio, profesionales, empresas, fundaciones, ONG entre otros, estén involucrados en este proceso, porque la planificación también tiene que ver con la una visión integradora de todos estos actores”.

Conforme finalice el proceso de contratación, la primera etapa de la actualización del plan regulador, se estima comience a fines del mes de septiembre, instancia fundamental para decidir cuál será la nueva ciudad que quieren todos los villalemaninos.